Madre mia que jueves pasé ayer, si lo llego a saber no me levanto de la cama, hubiese ganado más. Todo empezó como un jueves normal pensando en el fin de semana en el descanso en la navidad en esos 2 días de fiesta, pues chicos, cuando se cruza el trabajo se cruza y no hay manera y cuando te toca el cliente cabezón y jilipollas tan poco la hay. Y tonto de mi cuando termino la jornada digo:"ya esta, tranquilo ahora nos vamos a yoga y se soluciona todo. Pues llego al centro deportivo y me dicen que hoy no hay clase que la yogui está mala que no me han podido avisar que no tienen mi phone. Joder, ¡claro que no tenéis mi phone no me habéis avisado! que lo sentían, no perdona el que lo siento soy yo que me hubiese ahorrado las prisas y el viajecito. Esperemos que hoy viernes cambien las tornas.
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