miércoles, enero 05, 2011

Sunset Park | Paul Auster


Durante casi un año ya, viene tomando fotografías de cosas abandonadas. Hay como mínimo dos servicios al día, a veces hasta seis o siete, y siempre que entra con sus huestes en otro domicilio, se enfrenta con las familias que se han marchado. Los asuentes han huido a toda prisa, avergonzados, confusos, y seguro que dondequiera que habiten ahora (si es que han encontrado un lugar para vivir y no han acampado en la calle) sus nuevas viviendas son más pequeñas que los hogares que han perdido. Cada casa es una historia de fracaso -de insolvencia e impago, deudas y ejecución de hipoteca- y él se ha propuesto documentar los últimos y persistentes rastros de esas vidas desperdigadas con objeto de demostrar que las familias desaparecidas estuvieron allí una vez, que los fantasmas de gente que nunca verá ni conocerá siguen presentes en los desechos esparcidos por sus casas vacías.
Sacar la basura, llaman a ese trabajo, y él forma parte de un equipo de cuatro personas empleado por la Compañía Inmobiliaria Dunbar, que subcontrata sus servicios de "mantenimiento de viviendas" a los bancos de la zona que ahora son los dueños de las propiedades en cuestión. En las extensas llanuras del sur de Florida abundan esas estructuras huérfanas, y como a los bancos les interesa volverlas a vender cuanto antes, hay que limpiar, arreglar y preparar las casas desalojadas para enseñárselas a los posibles compradores.


El primer regalo de estas navidades y una muy grata sorpresa. Auster es uno de mis autores preferidos aunque ha habido momentos que lo he tachado de la lista por esos bajones que nunca he entendio. Sunset Park es una historiandentro de muchas yo me quedo con la del luchador, pero no un luchador cualquiera… los actos tienen consecuencias y hay que acarrear con ellas hasta el final.
No es el mejor libro de Paul Auster pero tiene la lección muy bien aprendida y sabe como seducirte desde el primer párrafo. Lo malo, que lleva tiempo dejándonos a medidas, no es una historia redonda y te quedas con la sensación de que podía haber dado mucho más de si, pero bueno, si eres un incondicional de este autor hay que leerlo todo.

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