miércoles, abril 29, 2015

Museo Argentino de Ciencias Naturales





Cuando uno navega por la red y se encuentra trabajos de este nivelazo, es una auténtica satisfacción encontrarlos y postearlo en este blog. Nosotros si fuésemos a ese museo, en lo que menos nos íbamos a fijar era en su contenido. Deformación profesional… que se dice. El profesional culpable de este pedazo de trabajo, es el diseñador argentino Lucas Rod. No os perdáis su portfolio en Behance, porque no tiene desperdicio.

El peso del corazón | Rosa Montero


Los humanos eran los lentos y pesados paquidermos, mientras que los replicantes eran rápidos y desesperados tigres, pensó Bruna Husky, consumida por la impaciencia de tener  que aguardar en la cola. Recordó una vez más aquella frase de un autor antiguo que un día citó su amigo el archivero: El ininterrumpido ir y venir del tigre ante los barrotes de su jaula para que no se le escape el único y brevísimo instante de la salvación. Bruna se la sabía de memoria porque le había impresionado: ella era ese tigre atrapado en la diminuta cárcel de su vida. Los humanos, con sus existencias larguísimas y sus vejeces interminables, solían glorificar pomposamente las ventajas del aprendizaje; incluso de las malas experiencias, sostenían, se podían sacar cosas. Pero Husky no podía perder el tiempo en esas tonterías; como todo androide, sólo vivía una década, de la cual le quedaban tres años, diez meses y vetiún días, y tenía la certeza de que había saberes que no merecía la pena saber. Por ejemplo ella hubiera podido vivir muy feliz sin conocer la cochambre de las Zonas Cero; pero aquí estaba, tras haber hecho un viaje inútil a la miseria.
¡Buenos días! Estás abandonando la Zona Cero. A partir de este punto, sólo personas con autorización vigente, por favor. ¡Muchas Gracias!


Tenía mucha curiosidad por este segundo libro de Husky, pero me he llevado una pequeña decepción. En el primer libro de la saga, lágrimas en la lluvia, la historia tenía su gracia pero en el peso del corazón; todo se ha derrumbado como un ligero castillo de naipes. Y que no me vengan con lo del peso de la vida y la oscuridad de la muerte, porque eso ya se trato en el primer libro. Y nos quedó bastante claro a todos. La verdad es que es una pena, porque no hay por donde cogerlo.

lunes, abril 27, 2015

FYeah Tattoos




Los tatuajes son como los colores, los hay para todos los gustos. En la web FYeah Tattoos los tienen de todas las formas, colores, tamaños estilos… FYeah Tattoos.

sábado, abril 25, 2015

Marcela Bolívar y su bello universo…




Alucinando con el universo digital de la artista Marcela Bolívar. Por momentos inquietante pero sobre todo un hermoso trabajo.

jueves, abril 23, 2015

martes, abril 07, 2015

Sport Shoes Concept




Con infografías de este tipo, tiene que ser muy fácil vender un producto. Y luego hay gente que no cree en las cosas bien hechas. Paweł Skupień

lunes, abril 06, 2015

Just Mu Pics 7 by Mikhail Vyrtsev




Comenzamos la semana con unas ilustraciones superatractivas a cargo del ilustrador Mikhail Vyrtsev. Una maravilla la manera que tiene de trabajar con las formas y el color.

domingo, abril 05, 2015

A ciegas | Josh Malerman


Malorie, pensativa, de pie en la cocina.
Tiene las manos húmedas. Está temblando. Nervisosa, tamborilea con el dedo gordo del pie en la baldosa rota. Es temprano; probablemente el sol apenas asoma por el horizonte. Contempla cómo la tímida luz suaviza la tonalidad oscura de las densas cortinas, y piensa,
Eso ha sido bruma.
Los niños duermen en el salón bajo la malla de gallinero cubierta por tela negra. Tal vez la oyeron hace unos instantes cuando estaba de rodillas en el jardín. El ruido que hizo debió transmitirse a través de los micrófonos, de camino a los altavoces situados junto a sus camas.
Se mira las manos y repara en el brillo sutil que es el reflejo de la luz de las velas. Sí, están húmedas. Es la capa que ha impreso el rocío de la mañana.
En la cocina, Malorie respira hondo antes de apagar la vela de un soplido. Mira en torno de la habitación, consciente de la herrumbre de los cacharros y los platos desconchados. La caja de cartón que hace las veces de basurero. Las sillas, que aguantan cogidas por alambre. Las paredes mugrientas. La tierra en los pies y las manos sucias de los niños. También las manchas más antiguas. La descolorida parte inferior de las paredes del salón, púrpura oscuro que ha ido transformándose en marrón con el paso del tiempo. Eso es sangre. La moqueta del comedor también está descolorida, por mucho que Malorie se empeñe en frotar.


Cuando empiezas a leer este libro el planteamiento del autor te parece sorprendente, pero desde las primeras páginas ya te estás planteando que el final tiene que tener un desenlace genial, porque sino, todo se quedará en agua de borrajas. Bueno, pues Josh Malerman ha tenido la feliz idea de escribir una historia de terror y no explicar el porqué de todo.
En muchas ocasiones las atmósferas de este relato me han recordado a el libro Ensayo sobre la ceguera, salvando las distancias, porque no se nos ocurre comparar a Josh con el superdotado Saramago.

viernes, abril 03, 2015

Interstellar


 Llevábamos un par de meses intentando ver esta película y por fin ayer se hizo realidad. Menuda paranoia, el director, Christopher Nolan dice que hay que verla unas cuantas veces para entender su significado. Yo aunque la mitad de la peli solo la medio entendí, fue una gozada poder disfrutar de la dirección, el guión, los personajes y la banda sonora.

Urban Influence


Cada vez que vemos estudios de siseño de este tipo, no sabemos si estamos viendo una película de ciencia ficción o la realidad. Más info en el genial blog de Mr-Cup.